Pese a que en junio hubo déficit fiscal, Javier Milei cerró el semestre con superávit
Pese a la licuadora sobre los gastos, por la menor recaudación de impuestos y aportes de la seguridad social, en junio las cuentas de la Administración Pública Nacional resultaron deficitarias en $ 1,82 billones.
No obstante, por los resultados positivos de los meses anteriores, en el primer semestre el resultado primario (antes del pago de intereses) fue de $ 4,97 billones, que se redujo a $ 340.000 millones por los pagos de intereses ($ 4,63 billones), de acuerdo a la Oficina de Presupuesto del Congreso ( OPC). Los intereses pasaron a representar el 12,2% del gasto total.
El Informe señala que “durante el mes de junio se observó una baja de la recaudación ajustada por IPC del orden del 14,1% interanual. Si bien este desempeño fue peor que el de los dos meses previos, deben tenerse en cuenta una serie de cuestiones de índole administrativa que afectaron la recaudación del sexto mes del año. Entre otras se destaca la postergación a agosto del pago del saldo de la declaración jurada anual del Impuesto sobre los Bienes Personales y del Impuesto a las Ganancias para Personas Humanas».
Por eso, el Informe agrega que “corrigiendo la recaudación por ese efecto, se estima una caída real en torno al 9,5% interanual, en línea con lo que se había observado en el primer cuatrimestre”, mientras que el desempeño de mayo fue mejor (+11,8% interanual real) por el pago de la declaración jurada de Ganancias Sociedades por parte de empresas con cierre de balance en diciembre.
“También atenuaron la recaudación de junio que el último vencimiento del Impuesto PAIS pasó a julio y que se registraron tres días menos de recaudación que en igual mes del año pasado. Estas cuestiones puntuales de junio se sumaron a otras que viene operando de manera estructural, como la implementación del Impuesto Cedular y la modificación del esquema de percepciones por consumos en moneda extranjera”.
Por el lado del gasto, la licuadora no se detuvo en junio. Jubilaciones y demás prestaciones sociales cayeron un 17,2% interanual, los gastos en personal se redujeron 19,9%; las transferencias a las provincias cayeron 72,2% y a universidades, 43,8%; y los gastos de capital, 81,7%. Los subsidios (como en energía y transporte) retrocedieron un 61%.
En los primeros 6 meses del año, las mayores reducciones del gasto abarcaron:
- Jubilaciones: como consecuencia de la actualización de haberes por debajo de la inflación, parcialmente compensado por la aplicación de bonos otorgados a los de menores ingresos, los haberes promedio de seis meses de 2024 tuvieron una suba de 163,3% interanual, mientras que la inflación promedio fue del 276,8%: una pérdida de poder de compra del orden del 30,1% mientras, los haberes con bonos en promedio se redujeron 19%. El gasto ejecutado por ANSES sumó $12,95 billones (-24,5% interanual real), de los cuales $11,54 billones corresponden a la liquidación regular (-27,8% real) y $1,40 billones (20% real) a complementos de ingresos para los haberes más bajos (bonos). Las prestaciones del personal retirado de las Fuerzas Armadas y de Seguridad ($1,48 billones retrocedieron 13,9% real.
- Políticas Alimentarias: el gasto totalizó $ 0,86 billones (una caída de 17,9% interanual real). La prestación Alimentar se llevó $ 86 billones ( -13,1%). El valor promedio de las prestaciones arroja una pérdida de poder de compra del orden de 12,6% interanual real en seis meses, a pesar de los aumentos otorgados en lo que va del año. En tanto, casi no se registraron transferencias a comedores comunitarios y merenderos (-99,1% real).
- Potenciar Trabajo y sus continuadores (Volver al Trabajo y Acompañamiento Social): recibió $ 0,61 billones (-56,6%), explicado principalmente por la pérdida de poder de compra de las prestaciones. Atención Médica a los beneficiarios de Pensiones no contributivas, $ 0,20 billones (-24,6%); Becas Progresar, $ 0,15 billones (-60,2%) y Programa Acompañar, $ 0,02 billones (-81,6%).
- Provincias: la reducción fue impulsada principalmente por el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), con un devengado de $ 0,056 billones (-85,0%) de los cuales se pagaron únicamente $ 0,013 billones, dentro del Programa Nacional de Compensación Salarial Docente. También hubo caídas de 19,5% en las transferencias a comedores escolares, que sumaron 4.000 millones; al programa de universalización de la jornada completa o extendida en la educación primaria, $ 76.000 millones (-10,7%) y las efectuadas en el marco de los Aportes del Tesoro Nacional a las provincias (ATN), $ 26.000 millones (-38,9%). No se ejecutaron transferencias a las Cajas Previsionales Provinciales ni al Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires.
- Universidades: fondos para el pago de salarios de personal docente y autoridades superiores sumaron $ 0,75 billones (-30,6%), de salarios de personal no docente, $ 0,44 billones (-27,0%). Asistencia Financiera para el Funcionamiento Universitarios, $ 80.000 millones (-36,4%). Asistencia Financiera a Hospitales Universitarios, $ 30.000 millones (-23,5%)
- AUH: registró una suba de $ 1,34 billones (17,2%), principalmente porque se duplicó el valor de las prestaciones en enero 2024 (Decreto 117/23), adicionalmente al incremento por movilidad de diciembre, marzo y junio últimos. En el período analizado, el valor promedio de la AUH tuvo una suba de 363,8% interanual, mientras que la inflación promedio fue del 276,8%. Eso arroja un incremento del poder de compra del orden del 23,1% interanual.