Los precios regulados por el Estado y los servicios lideran la inflación
Los precios regulados por el Estado y los servicios siguen siendo los que más vienen impulsando la inflación en el año. En junio, con una suba promedio de los precios del 4,6%, los precios regulados se encarecieron 8,1% y los de los servicios (regulados o no) un 8,7%.
“La división de mayor aumento en el mes fue vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (14,3%), por las subas en las tarifas de electricidad y gas y en alquiler de la vivienda. Le siguieron restaurantes y hoteles (6,3%) y educación (5,7%) por subas en todos los niveles de enseñanza”, señaló el informe del INDEC. Y «las dos divisiones que registraron las menores variaciones en junio fueron bebidas alcohólicas y tabaco (2,1%) y equipamiento y mantenimiento del hogar (2,3%)».
En los primeros seis meses, la inflación promedio fue 79,8% y los precios regulados de 141%. De aquí se desprende que los aumentos de los precios y las tarifas reguladas por el Estado o las Provincias, incluida la Ciudad de Buenos Aires, son los que más están afectando a la clase media. Y el impacto no es mayor porque el Gobierno estuvo postergando aumentos tarifarios y en los combustibles con la vista puesta en que el índice de inflación promedio no supere el 5% mensual.
Por su parte, los precios de los servicios (regulados o no) tuvieron un alza aun mayor: 8,7% que también impactan más en la clase media.
Sin estos incrementos de los precios regulados y de los servicios, la inflación del mes pasado se hubiese ubicado por debajo del 4% y la del semestre hubiese sido inferior al 70%.
Los precios de los alimentos (3% en junio y 70,5% en el semestre) se ubicaron por debajo de la inflación promedio, rubro que cada vez más pierde impulso por los limites del poder de compra de la población.
Una novedad fue que pese a las medidas del Gobierno, las cuotas de la prepagas tuvieron un alza del 5,5% en junio con un acumulado en el semestre del 134,2%, muy por arriba de la inflación promedio (79,8%).
Otro dato del informe oficial ha sido que Capital y GBA fueron las regiones con el mayor incremento promedio de los precios (82,2%) por la mayor incidencia de los servicios.
La consultora ACM señaló que “desde diciembre de 2023 se observa un proceso de corrección de precios relativos. En el mes de análisis, se destaca una significativa reanudación de esta corrección, con los precios de las tarifas de servicios públicos liderando las alzas del mes. Comparando el incremento de precios desde 2019, todavía se nota una disparidad entre los distintos segmentos de precios, aunque menor en comparación a las “radiografías” previas”. Esto anticipa que los precios regulados seguirán impulsando la inflación hacia arriba.
Es lo que señala consultora LCG. “En julio computarán los aumentos de naftas, prepagas y agua (en la provincia de Buenos Aires) y quedará definir los aumentos postergados de electricidad y gas. Además, el mes comenzó con cierta volatilidad cambiaria y la suba en el precio de los dólares libres podría volver a traccionar aumentos preventivos”.
Por otro lado, “el relevamiento de precios de LCG ya acumula un 2,3% de inflación en alimentos y bebidas en las dos primeras semanas, 0,8 puntos más que en junio. Seguimos diciendo que el verdadero test para ver si entramos en un régimen de inflación mensual más bajo deberá hacerse con la actividad repuntando, sumado a salarios recortando la caída de los últimos tiempos. En ese momento podremos ver si las expectativas inflacionarias están realmente ancladas a la baja”.
“Desde LCG esperamos inflación en torno al 160% anual medida a diciembre, lo que implicaría un 235% promedio anual en todo el año”, finaliza el informe.