La nafta súper se aleja cada vez más del bolsillo de las clases media y baja
Desde enero, cuando se liberaron los precios del mercado de combustibles, la clase media empezó a volcarse de manera cada vez más notoria de la nafta «premium» a la «súper», combustible que miles de personas más consumen a diario en la provincia para trasladarse desde barrios y villas a lugares de trabajo, servicios de salud, ferias, supermercados o para llevar a los chicos a la escuela.
En la Argentina de hoy son muchas las opciones para comparar las metas alcanzadas por el Gobierno nacional en variables macroeconómicas como la inflación y el déficit público con la apretada realidad cotidiana de las economías domésticas, la del bolsillo de los hogares, el poder adquisitivo de sus ingresos y la capacidad de poder llegar a fin de mes sin prescindir de gastos indispensables de las canastas básicas de alimentos y servicios.
El Tribuno repasó las alzas de precio que acumuló la nafta súper en los surtidores salteños de YPF desde el 6 de junio de 2023 hasta la fecha, y las contrastó con las actualizaciones que tuvo el salario mínimo en los últimos doce meses. Hace exactamente un año en estaciones de servicio de la petrolera estatal el litro de nafta súper costaba $218,10 y el salario mínimo, vital y móvil era de $87.987. Es decir que alcanzaba para comprar 403 litros de súper. Hoy esta vale $1.010 y el salario mínimo, que tuvo su última actualización en mayo, es de $234.000. O sea que solo alcanza para 232 litros. Son 171 litros menos, lo que representa una caída del poder adquisitivo del 42,4%. La brecha se debe a una sencilla razón: en el período interanual la nafta súper se encareció un 363%, mientras que el salario mínimo solo fue aumentado un 166%.
En la nafta Infinia, que en junio de 2023 costaba $266 y sale ahora $1.211, el salto fue del 357%. Hace un año con un salario mínimo se podían cargar 331 litros y hoy solo 192.
En el gasoil, que valía un año atrás $233,6 y cuesta ahora $1.079, el aumentó interanual fue del 362%. En junio de 2023 con un salario mínimo se podían comprar 377 litros del combustible que utilizan las flotas de colectivos, los equipos de transporte de cargas y las maquinarias del agro. Hoy, con el salario que se fija como piso para todos los trabajadores mensualizados que ejercen la jornada completa de forma legal, solo se pueden comprar 217 litros del combustible que impulsa los motores diésel.
En el caso del diésel Infinia, que hace un año tenía en surtidores salteños de YPF un precio de $308,4 y cuesta hoy en las mismas estaciones de servicio $1.277, el encarecimiento interanual fue del 314%. En junio de 2023 con un salario mínimo podían adquirirse 285 litros del gasoil de mayor calidad y costo. Hoy, los $234.000, solo alcanzan para 183 litros.
En la infografía que acompaña a esta nota los lectores podrían ver, detalladamente, cada una de las actualizaciones que tuvo la nafta súper en Salta desde junio de 2023. En total fueron nueve las subas que acordó la gestión nacional de Alberto Fernández hasta dos días antes del cambio de gobierno. En ese lapso, la súper pasó de $218,10 a $450.
Ya con Javier MIlei en la presidencia de la Nación, desde el 13 de diciembre hasta el pasado 1 de junio se acumularon siete aumentos en los combustibles, seis de ellos en lo que va de 2024. Con Luis Caputo al frente del Palacio de Hacienda de la Nación, el litro de nafta súper escaló hasta los actuales $1.010.
Subas por encima de la inflación
En el último año, y con mayor acento desde enero, cuando se liberaron los precios en el mercado de combustibles, los precios de las naftas y el gasoil aumentaron mucho más que la inflación. Consultoras privadas calcularon para mayo último, quinto mes consecutivo con desaceleración en el Indice de Precios al Consumidor (IPC), una inflación interanual cercana al 280%. Es un 83% menos que las subas que acumuló la nafta súper desde junio de 2023 hasta el día de hoy.