Habló el dueño de la pizzería en la que clientes echaron a dos policías durante los disturbios en el Congreso: «Solo estaban entrando al baño»

Alejandro es el dueño de la pizzería La Americana, ubicada a metros del Congreso Nacional, y donde durante el tratamiento de la Ley Bases los clientes que estaban en el interior del local echaron a dos mujeres policías que querían pasar al baño. El hombre reconoció el momento de tensión que se vivió, aunque aclaró que es algo poco habitual que suceda en su local, acostumbrado a quedar en el medio de las manifestaciones.

«Fue un momento de tensión cuando dos mujeres policías quisieron ingresar al baño y unos clientes le impidieron la entrada. En el forcejeo se rompió el vidrio de una puerta, porque otros dos policías quisieron ayudarlas. Intervino el encargado, se aplacaron los ánimos, no fue más de un minuto de tensión», reconstruyó lo sucedido Alejandro.

Y agregó: «No cerramos en las manifestaciones a menos que haya algo muy, muy grave afuera. No suele suceder esto dentro del local. Sí por ahí que canten, tratamos de que no suceda, pero sucede». Nos mantenemos con calma y no hay agresiones ni hechos de violencia».

«Lo de ayer (por este miércoles) fue algo aislado que duró muy poco, enseguida se ve la intervención del encargado tratando de separar las cosas y ahí terminó todo», insistió el comerciante.

Alejandro comentó además que luego de que las dos agentes se retiraron del local, más policías llegaron para preguntar si había algún lesionado por el vidrio roto de la puerta.

«Algunos clientes estaban a favor de los que les obstruían la entrada a las policías y otros en contra. No tenía sentido, solo estaban entrando al baño», intentó contextualizar con serenidad el dueño del local, en diálogo con C5N..

Y luego marcó la filosofía de la pizzería, que está enclavada en Bartolomé Mitre y Callao, punto álgido cuando surgen protestas callejeras. «De la misma forma en que respetamos a los manifestantes respetamos a los policías. No había necesidad de eso», sostuvo Alejandro.

Entre reparaciones y limpieza, los destrozos ocurridos en el Congreso durante la sesión de la Ley Bases le ocasionan al Gobierno de la Ciudad un gasto de 278 millones de pesos. Así lo manifestó este jueves el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, quien cruzó a los violentos: «Son delincuentes, hicieron un desastre y van a tener que pagarlo».

Roturas en veredas, cordones, contenedores, tachos de basura, luminarias, bicicletas, bancos de plazas; y hasta grafitis formaban parte de la postal con la que amanecieron este jueves los alrededores al Congreso, luego de una jornada con graves incidentes. Manifestantes de izquierda, sectores sociales y sindicales enfrentaron a la Policía y hubo desde heridos hasta detenidos.

«No me vengan a decir que lo de ayer fue una manifestación pacífica, lo único que hicieron fue romper y violentar lo que nos pertenece a todos. ¿Por qué los porteños tendríamos que pagar el costo de esto? En nuestra gestión, el que rompe, también paga», apuntó este jueves el alcalde porteño.

El Palacio Legislativo amaneció este jueves como si fuera una zona de guerra: gran parte de los destrozos estuvieron focalizados en Plaza Congreso donde algunos bancos de hormigón y una gran cantidad de baldosas fueron literalmente destrozadas y varios contenedores de basura, quemados y vandalizados.