Guía para cultivar rosas trepadoras y embellecer el jardín

El rosal enredadera pertenece al gran género de las rosáceas y proceden de Asia. Tiene tallos espinosos y fuertes y alcanza una altura de cinco a diez metros si está bien cuidado. Cómo cultivar rosas trepadoras para decorar mi jardín.

Estas plantas son perfectas para decorar y perfumar pérgolas, las paredes de una terraza, los patios y el fondo de un jardín. Además de ser una hermosa forma de decorar un espacio al aire libre, los rosales trepadores suelen tener un lindo aroma y gran variedad de colores para elegir. En esta nota, sus características, sus cuidados y la mejor forma de cultivar estas rosas.

Hay tres tipos de rosales trepadores por los que se puede optar. Unos de flores de gran tamaño; otros que tienen flores pequeñas en forma de racimo o ramillete, y hay una variedad que tiene una sola floración muy abundante al año.

Los más conocidos en estos tres bloques son: el rosal New Dawn; el Elfe; la Lady Sylvia; el Oriental; el Aloha; el Pink Cloud y la Rosa Madame Alfred Carriere.

Una vez que se elija la variedad que mejor se adecue al espacio y al gusto de cada casa, hay algunas claves para cultivarlas y que crezcan fuertes y den flores hermosas.

La luz, la ubicación y la temperatura. Su exposición al sol debe estar controlada, no superando las cuatro horas diarias. Es recomendable plantar el rosal en una zona abierta para que no compita con otras plantas por la luz. No todas las especies son iguales – esto se puede preguntar cuando se compra -, pero algunas prefieren un poco más de sombra y otras más sol directo, soportando una mayor temperatura ambiente.

El riego y el abono. Estas plantas no soportan un suelo seco, pero tampoco encharcado. Esto significa que hay que tener un control preciso de su riego, de acuerdo a la especie que se plantó, la temperatura que hizo durante todo el día, y donde está ubicado el rosal. El tip más eficaz es tocar la tierra y sentir si tiene cierto grado de humedad.

Por otro lado, los rosales trepadores necesitan algún tipo de nutriente a finales del invierno o inicios de la primavera. Así, se consigue una floración más completa y abundante. Los especialistas recomiendan usar abonos naturales – como el compost que se puede hacer en una casa – o comprar alguno específico para este tipo de planta.

Guiarlo para que crezca y florezca bien. Es fundamental construir y fijar un soporte fuerte para los rosales trepadores, ya que necesitan una guía para adaptarse a la pared o a una glorieta. Hay que cuidar mucho que ese tutor soporte bien el peso, principalmente cuando la planta está llena de rosas.

Es bueno también, a medida que va creciendo, atar y ajustar los tallos con una cinta o una soguita liviana que no lastime a la planta, dejándole espacio para que pueda crecer con soltura.

Podarlo en forma regular. También, necesitan una poda. La primera hay que hacerla cuando el rosal tenga unos tres años y ya haya cubierto parte del soporte. Ya para este tiempo tendrá un tallo principal fuerte del que broten los laterales. La mejor época para podar los rosales es a finales de invierno o al inicio de la primavera.