Fumigaron la Escuela de Ballet, una docente se descompuso y suspendieron las clases
Momentos de angustia vivieron los padres y estudiantes de la Escuela de Ballet de la provincia, que toman clases en el subsuelo del Centro Cultural América, en Mitre 23. En la mañana este lunes, una docente alertó que se sentía descompuesta y debió ser trasladada de urgencia a un centro médico para que fuera asistida.
El alerta de los padres surgió al saber que el subsuelo del edificio fue fumigado, en la noche del sábado, temiendo que se trate de un nuevo caso masivo de intoxicación de estudiantes como lo que ocurrió semanas atrás con los chicos de la escuela Domingo Faustino Sarmiento.
En diálogo con El Tribuno, la directora de la Escuela de Ballet, Alejandra Cercená detalló que la fumigación se realizó el sábado y que el domingo fueron notificados de que ya se podía realizar la limpieza de los salones. «Una persona de mi confianza estuvo en el lugar y me confirmó que no había olor, y que estaba todo listo para limpiar y que los chicos tengan clases normales este lunes», confirmó la directora.
El lunes en la mañana, las actividades comenzaron en forma normal, a las 10 y fue cuando ocurrió la situación de descompostura de la docente. Ante la situación de alerta, Cércena expresó que se resolvió suspender las clases de la escuela, que se dictan en ese subsuelo, y por lo tanto las clases de la tarde no se concretaron.
«El resto de los chicos que toman clases en la Casa de la Cultura y el Teatro Provincial, no se suspendieron y este martes se retoman las actividades en forma normal, todos los grupos», expresó Cercená.
En la actualidad la Escuela de Ballet de la provincia tiene 200 alumnos que toman sus clases en forma itinerante, entre el subsuelo del Centro Cultural América, la Casa de la Cultura y el Teatro Provincial.
Desde el Centro Cultural América, su directora Verónica Teruel aclaró que la fumigación del subsuelo se realiza desde hace 7 años. «Fue el procedimiento que se hace todos los años, con la misma empresa. Se hace este procedimiento para eliminar alimañas, es un edificio antiguo en el pleno centro de la ciudad, así que buscamos sacar todos los bichitos. Desde la empresa me confirmaron que el procedimiento se había concretado en la noche del sábado y me aseguraron que tres horas después ya se podía limpiar», detalló Teruel y destacó que este lunes, el resto de las actividades que se realizan en el CCA, se concretaron con normalidad.
Hay que destacar en el subsuelo, además de la Escuela de Ballet, también se dictan clases del Ballet Foclórico de la Provincia, y funciona un destacamento policial.
Preocupación
En este momento de tensión, es que un grupo de padres de los alumnos de la Escuela de Ballet recordaron que en el subsuelo del CCA también se encuentra en una de las habitaciones, un generador eléctrico, que si bien está hace años en el edificio, es un emisor de contaminación para la salud de los estudiantes, además de un posible riesgo de vida si hubiera un incendio o explosión de este artefacto.
«Hoy, el subsuelo es una trampa para los estudiantes del Ballet, son todos menores, chicos pequeños, que si hubiera un incidente con ese artefacto no tienen cómo escapar, no hay salidas de emergencia ni se hacen simulacros. El problema de hoy, es porque ese espacio no tiene ventilación», expresó un padre que resolvió mantenerse en el anonimato, para evitarle conflictos a su hija.
La historia de la Escuela
La Escuela de Ballet fue creado en 2015, para la formación de bailarines profesionales de ballet clásico. La carrera tiene una duración de 8 años, divididos en 2 ciclos de 4 años cada uno, más un año de curso de perfeccionamiento.
Imparte la enseñanza práctica y teórica del ballet para la formación de bailarines, en forma gratuita. Desde su creación, la escuela no cuenta con un edifcio propio.