El reclamo a la Justicia por el hombre que tenía prohibido conducir y fue detenido por ir a 144 km/h: «No sean tan generosos»
En la medianoche del 5 de octubre de 2020, David Maldonado (43) conducía por Caballito mientras trabajaba como Uber trasladando a un pasajero, Virginio López (29). En el cruce de las avenidas Independencia y La Plata fue embestido por un Audi A4 conducido por Lucas Guerrero (27), quien iba a 144 kilómetros por hora sin haber respetado el semáforo en rojo. Producto del choque David falleció, el pasajero fue herido y Guerrero terminó condenado a 5 años y 6 meses de prisión.
Hace apenas 3 meses que logró salir de la cárcel con el beneficio de la condicional y, aunque debía cumplir una inhabilitación para conducir por 10 años, el pasado miércoles terminó detenido por la Policía de la Ciudad tras conducir con exceso de velocidad por Balvanera. Ahora se hizo lugar al pedido de la fiscalía y el juzgado le otorgó prisión preventiva hasta el juicio.
En diálogo con Clarín, Alexander Maldonado, hermano de la víctima de aquel choque de 2020, expresa: “Era obvio que esto podía volver a pasar. Cuando esto pasó, mi hermano andaba en un Chevrolet y él andaba en un Audi A4. No es un auto barato. Así que si salía nadie le iba a decir ‘no vas a andar nunca más en auto’. Iba a volver a manejar”.
La noche lluviosa del 5 de octubre el desenlace fatal quedó registrado por las cámaras de seguridad. Guerrero conducía por avenida Independencia. Desde el cruce con la calle Colombres circulaba a gran velocidad y sin respetar los semáforos. Las pericias indican que cuando cruzó Colombres iba lanzado a 144 kilómetros por hora, velocidad con la que llegó a avenida La Plata.
En la intersección de ambas avenidas se encontró con el semáforo en rojo. Pero no se detuvo. Así embistió el auto en el que viajaba Maldonado, que falleció en el acto, según explica Alexander. López, el pasajero, sufrió traumatismo en el cráneo y fracturas en la cara, en uno de sus brazos y en la pierna.
David Maldonado murió cuando el auto que manejaba fue embestido por otro vehículo que iba a 144 kilómetros por hora.“El golpe fue tan fuerte que el Audi lo arrastró como 30 o 40 metros. Después del choque, llegaron los bomberos y tuvieron que sacar a mi hermano rompiendo el techo del auto, ya que era la única forma”, cuenta.
Alexander recuerda que su madre y él no se enteraron de lo acontecido hasta las 17 de ese 5 de octubre: “No fue directamente por la policía, en realidad nos habló un vecino de mi hermano. Él se contactó conmigo y yo con otro vecino que me contó y me dio los datos de la comisaría. Como mi hermano figuraba con otra dirección tampoco tenían datos de nadie y él vivía solo”.
David, que vivía en Tristán Suárez, trabajaba como Uber desde hacía 6 años y su familia era de origen humilde, trabajadora.
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La Policía de la Ciudad arrestó al hombre de 27 años, que estaba inhabilitado para conducir. Lo condenaron por un homicidio culposo agravado por conducción imprudente, en un caso que se remonta a octubre de 2020.
“La verdad que (Guerrero) venía a exceso de velocidad. Durante el juicio el abogado de él dijo que no fue que andaba a velocidad porque quería, sino porque lo venían persiguiendo, que le quisieron robar, que tenía miedo. Bueno, era mentira eso. Estaba de testigo la policía diciendo mediante los videos a qué velocidad venía”, señala Alexander.
Los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N° 1 no dieron crédito a la versión de la defensa de Guerrero y concluyeron que actuó a su “libre voluntad”.
El juicio se extendió aproximadamente durante un año. La madre de David, Beatriz, fue querellante. Recién en 2021, el Tribunal condenó al conductor a la pena de 5 años y 6 meses de prisión por “homicidio culposo en concurso ideal con lesiones graves culposas, ambos agravados por conducción imprudente de un vehículo automotor y por haber circulado en exceso de velocidad y violando las señalizaciones lumínicas”.
El 5 de marzo pasado había sido beneficiado con libertad condicional hasta el vencimiento definitivo de la pena que se le impuso, el 4 de abril de 2026.
“Ya sabíamos que iba a salir antes. Hablamos con el abogado para que no le den la condicional, pero no se pudo hacer. Habrán puesto plata encima, supongo. Por lo que tenía entendido ellos sí son de plata y nosotros no. Le dieron muy pocos años, pero el abogado que teníamos nos dijo que anteriormente había habido un accidente parecido y también fue la misma condena, no fueron más de 6 años”, explica el hermano de la víctima.
El 31 de julio pasado, en horas de la madrugada, un Fiat Cronos eludió de forma imprudente un control policial de personal de la Comisaría Vecinal 3A en Boulogne Sur Mer y Tucumán y se dio a la fuga. Tras una persecución lograron alcanzar al auto que iba a gran velocidad. El conductor se tornó hostil, insultando y amenazando a los policías.
La sorpresa llegó cuando lo identificaron: descubrieron que era la misma persona que había sido condenada en 2021 por el homicidio de David Maldonado y las lesiones a Virginio López. Por la gravedad de la situación intervino la División Investigaciones Especiales.
De inmediato se le dio aviso a la Unidad Fiscal Este, del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires, que dispuso la detención del imputado. El viernes la Unidad de Flagrancia Este del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad pidió la prisión preventiva hasta la celebración del juicio.
“No me sorprende para nada esto que pasó, que otra vez vuelva a pasar. A mi mamá le conté y tampoco le sorprendió mucho. Sabía que podía pasar. Aunque tiene que ir preso, es lo que merece. Le habían dicho en el juicio que tenía 10 años restringidos para poder usar vehículos, pero era algo que no iba a pasar”, remarca Alexander a Clarín.
El hermano de David agradece que no se haya repetido la misma trágica historia, y espera que esta vez “no sean tan generosos” con la condena que pueda llegar a recibir Guerrero.