El cambio de época en el Coloquio de Idea: «En el mundo no nos querían escuchar y hoy vuelven a preguntar»

Aunque el formato se repite, el Coloquio de Idea se saldrá del molde esta vez y no solo porque lo preside una mujer, la CEO de Visa para el Cono Sur, Gabriela Renaudo. También, porque en ese círculo se coincide con la política económica de Milei y lo viven como un cambio de época.

“El año pasado en el mundo no nos querían escuchar y hoy vuelven a preguntar. Hay interés por la Argentina”, dice a Clarín el presidente de esta organización de ejecutivos, Santiago Mignone, socio del coloso de consultora global, PWC.

Los organizadores buscan atravesar la conferencia de los próximos 16 a 18 de octubre en Mar del Plata con el mensaje de “si no es ahora, cuándo” que encierra un llamado a la elite empresaria.

Renaudo lo sintetizó de este manera: “Está claro que para invertir se necesitan condiciones. Como empresarios tenemos que pedir para hacer y de esa manera cambiar la percepción de la sociedad sobre nosotros. Por eso nuestra lema es transformar, invertir, sostener . Es una invitación a hacer algo distinto que esté a la altura de los enormes desafíos que enfrenta la Argentina”,

Junto con 60 CEO de las principales compañías se elaboraron 14 propuestas. Es curioso pero como pocas veces en la historia reciente hubo tanta armonía con los principios de Milei, que a diferencia del Coloquio del año pasado cuando en el fragor de la campaña electoral desairó a Idea, este año se encargará del cierre. Además asiste buena parte de su gabinete a las jornadas.

“Pusimos el foco en la generación de empleo con ideas que ahora vemos plasmadas en parte en la Ley Bases. También insistimos en la importancia de un gasto público equilibrado, algo que el actual Gobierno tiene como prioridad. Y en el tema fiscal, hemos puesto sobre la mesa la pérdida de competitividad que genera el entramado tributario en los bienes y servicios que se producen en nuestra economía”, soltó Mignone.

“Coincidimos en la agenda, este es un momento clave y hacemos un llamado a invertir para un crecimiento sostenible en un país en el que casi 53% de la población es pobre”, dijo Renaudo.

Claro que esa visión no significa que comulguen plenamente. El último miércoles, Idea como la poderosa Asociación Empresaria Argentina, marcaron distancia con Milei y sus descalificaciones. “La democracia es la que exige diálogo y la tolerancia entre aquellos que piensan diferente. En ese marco es importante que las discusiones puedan darse sin descalificaciones, de manera que cada ciudadano pueda expresarse en libertad, sin condicionamientos”, señalaron en un comunicado.

Hay en su agenda otros temas pendientes. Así en la reforma laboral buscan la modificación de los convenios colectivos, la integración con las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial y el desarrollo de la cadena de valor.

Otro asunto es la política cambiaria. “Entendemos que es progresiva y coincidimos que primero hay que atacar el déficit para bajar la inflación. Es una estrategia que tiene sentido”, señaló Mignone.

Por cierto, en los pasillos del Sheraton desfilarán lobbistas y dueños de empresas muy atentos a los funcionarios, ya que salvo los gobernadores habrá pocos políticos. Tampoco sindicalistas.

Como sucede casi siempre el cupo ya está desbordado y la lista de espera es larga, pese a una inscripción de $ 1,4 millón para los socios y $ 3 millones para el resto.

Eso sí, exponen figuras que pocas veces se hacen ver como Luis Pérez Companc. También Hernán Kazah, del fondo de inversión más poderoso en tecnológicas e Ignacio Bartolomé del grupo Don Mario que lidera con semillas en Brasil y EE.UU. En otros paneles, Mariano Bosch (Adeco Agro), Verónica Andreani, Manuel santos Uribelarrea (líder en energía y agro) y Eduardo Bastitta de Plaza Logística y Mas Colonia y sobre todo uno de los asesores dilectos de Milei.

Nicolás Braun (La Anónima), Roberto Murchison (Murchison) y Carolina Castro (Autopartista Guidi) hablarán sobre los desafíos de invertir en proyectos para el desarrollo.

Del exterior traen a Andrés Velasco Brañes en lo que es todo un mensaje. Fue ministro de Hacienda de Chile cuando la presidenta era la socialista Michelle Bachelet. .

El Coloquio tiene una parte pública con sus conferencias, debates y la siempre esperada fiesta del jueves por la noche que corría por cuenta del HSBC de capitales ingleses y chinos que se batió en retirada y ahora es del Galicia que compró esa operación. La parte privada son los almuerzos organizados por bancos y algunas compañías en los restaurantes más coquetos de Mar del Plata. Esta vez también se saldrán del molde. ¿La excusa? El Coloquio cumple 60 años.