12 de noviembre de 2024

Deuda en pesos: el Gobierno amplió por decreto la emisión de letras del Tesoro con vencimiento en 2024

En un nuevo movimiento para traspasar la deuda del Banco Central al Tesoro, el Gobierno amplió en $ 35 billones la emisión de letras reembolsables durante el ejercicio 2024 y autorizó la colocación de $ 30 billones para afrontar la renovación de vencimientos que se produzcan durante el final del año y cuyo vencimiento supere el ejercicio fiscal corriente y sea menor a los 90 días, es decir, durante 2025.

El objetivo es profundizar la «estrategia de reducción de la emisión monetaria vía rotación de Pases a Letras del Tesoro», según explica el decreto publicado este lunes en el Boletín Oficial. «La deuda de largo plazo se considera aquella que exceda el ejercicio y que exceda 90 días. De ahí surge la diferencia (entre las dos emisiones), para que a fin del ejercicio puedas emitir por plazos que excedan el ejercicio», señalaron fuentes del Ministerio de Economía.

La medida se conoció previo al inicio de una temporada desafiante en materia fiscal. Después de obtener un superávit financiero del 0,2% del PBI entre enero y abril, el Ministerio de Economía espera un resultado más «apretado» en junio por los mayores gastos para el pago del aguinaldo a los jubilados y los empleados del sector público así como por los subsidios a la energía ante la suspensión de los aumentos de tarifas.

Luis Caputo necesita renovar los vencimientos de deuda para cubrir las obligaciones en pesos y colocar un excedente que le permita sostener el superávit en un escenario de recaudación en caída. Entre mayo y agosto, vencen $ 19,4 billones de la deuda en pesos, el 70% de los casi $ 27 billones previstos este año. El decreto le permitirá expandir la deuda de corto plazo, posiblemente a través de las Lecap, sin pasar por el Congreso.

Según los considerandos de la medida firmada por todo el gabinete, se busca «dar cumplimiento a las operaciones previstas en el programa financiero, las que deben ser reembolsadas en el mismo ejercicio financiero en que se emitan» y «la naturaleza excepcional de la situación planteada hace imposible seguir los trámites ordinarios previstos en la Constitución Nacional para la sanción de leyes».

«Esto indicaría que Caputo va a seguir absorbiendo la liquidez que los bancos tienen colocada en el Banco Central en pases pasivos hacia letras del Tesoro. Esto, con la idea de desarmar los pases y girárselo al Tesoro y que se haga cargo de deuda corta de menos de 90 días», explicó el economista Jorge Neyro.

Desde fines de diciembre, el Banco Central dejó de licitar Leliqs (a 28 días) y los bancos se fueron a pases (a 1 día). Mediante la baja de tasas, esa cuenta se redujo de $ 44 billones a $ 26 billones y, en paralelo, el Tesoro amplió la toma de deuda ofreciendo mejores tasas. En la última licitación, las Lecap se ubicaron entre 3,8 y 4,2% mensual, con vencimientos a junio, julio y agosto, una deuda más cara que el 2,8% de los pases del organismo monetario.

Con ese esquema, el BCRA busca reducir la emisión de pesos para pagar intereses y mejorar su balance, en detrimento del Tesoro. «Es relevante aclarar que la deuda no desaparece mirando el sector público consolidado, sino que cambia de manos del BCRA al Tesoro. En otras palabras, el Tesoro queda más comprometido en mantener la disciplina fiscal para poder pagar o mantener vigente el roll over de los vencimientos», aseguró Pedro Siaba Serrate, de PPI.

Las Lecap ya fueron utilizadas por el propio Caputo en 2018 y también se emitieron en 2019 y 2022. Para algunos analistas, se trata instrumentos que pueden venderse en el mercado secundario y ser líquidas en el momento, lo cual puede generar suba de tasas o dificultades para renovar la deuda del Tesoro y que el BCRA tenga que salir a comprar las letras para auxiliarlo.

«Cuando las papas queman terminan siendo monetizadas, con este gobierno hemos tenido monetización de deuda del Tesoro varias veces a pesar de que Milei sostiene que tiene que ser un delito penal, es un pasivo de corto plazo que sigue teniendo un riesgo enorme», dijo Pablo Repetto, director de Aurum, quien precisó que las Lecap se emiten a 60, 75 y 90 días.

El otro frente que miran los analistas es el fiscal. La emisión de nueva deuda en pesos aumenta la exigencia del Tesoro a futuro para cubrir esas obligaciones mediante una mayor recaudación de impuestos o la asistencia del BCRA, algo que el Gobierno busca evitar mediante un fuerte apretón monetario, aunque sigue habiendo fuentes de emisión como los pases y por la compra de reservas.

«La estrategia muestra los límites del frágil esquema fiscal del gobierno que precisa de este nivel de emisión del Tesoro para hacer frente a los gastos ante una recaudación que flaquea mes a mes. Por otro lado, abulta los vencimientos del Tesoro a mediano plazo, cuestión que siempre está en la mira de los que evalúan la capacidad de pago del país», advirtió Haroldo Montagu, de la consultora Vectorial.

Clarín

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *