Con el consumo hundido se sigue demorando la recuperación de la economía
Pese a un leve alza de los salarios que en el último mes le habrían ganado a la inflación, el repunte del consumo no llega y le sigue metiendo suspenso al rebote de la economía. Con la recuperación en forma de V corta ya descartada, los analistas advierten que podría extenderse el estancamiento.
Hasta hace unas semanas se esperaba que en junio empezara a notarse alguna recuperación del consumo. Pero hasta ahora ese dato positivo no aparece. La recaudación del mes pasado trajo un dato que pinta el estado del mercado interno: en términos reales, descontando el impacto de la inflación, los ingresos por el IVA cayeron 19%.
«El piso de la recesión se ubicó entre marzo y mayo, aunque la recuperación hacia adelante será lenta sin claros drivers de crecimiento. En efecto, los primeros indicadores de actividad del mes de mayo confirman que la recesión se sigue sintiendo con fuerza en diversos sectores de la economía», señala la Fundación Capital.
«Hacia delante, el consumo seguirá limitado en el marco de una recuperación de los ingresos muy parcial, que podría amesetarse con una desinflación que encontrará un freno y un mercado laboral en tensión», agregan.
Los salarios privados ya tocaron piso y se recuperaron 2,8% en términos reales en el período febrero-abril, aunque sin compensar la abrupta caída de diciembre y enero. Los ingresos de los trabajadores del sector público y los informales vienen más retrasados.
Con una suba promedio del 12%, los salarios del sector privado mejoraron respecto de la inflación de ese mes, que fue del 8,83%. Pero los del sector público (7,5%) y los de trabajadores informales (7,8%) continuaron por debajo de la suba de los precios.
En promedio el alza salarial de abril fue del 10,2%, acumulando en cuatro meses un incremento del 60,3% por debajo de la inflación que fue del 65%, según los datos del INDEC.
«Para mayo, el promedio de los convenios relevados anticipan nuevamente una leve recuperación, con subas en los acuerdos paritarios en promedio del 7% mensual frente a una inflación del 4,2%. En el tercer trimestre la mejora del poder adquisitivo podría amesetarse, en línea con una desinflación que se frenaría en el marco del retomado ajuste de precios relativos», precisaron desde la FC.
«La recuperación del salario real podrá traccionar algo de consumo en lo inmediato, pero será en el margen«, señalaron desde la consultora LCG.
Así, los indicadores adelantados de mayo exhiben datos mixtos: el consumo masivo mostró un incremento del 1,7% mensual en la medición desestacionalizada, aunque todavía está 14,8% por debajo del nivel de noviembre. A su vez, la venta de autos al mercado interno se expandió un 6,2% mensual en mayo, si bien se sostiene un 11,5% por debajo de noviembre.
Mientras el consumo no se recupera, la industria y la construcción siguen totalmente en rojo. Desde la Fundación Capital marcan que esta caída de la economía es más pronunciada que la que se registró en las crisis de 2009, 2014, 2016 y 2018. Pero es más acotada en relación a las crisis del 2001 y la del COVID en 2020.
Entre noviembre del año pasado y abril el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) que mide el INDEC bajó 4,8%. Por su parte, entre el shock de diciembre de 2001 y abril de 2002 la contracción fue del 6,2% y en medio de la pandemia, el PBI cayó 23,8% en dos meses.
Para la Fundación Capital, la recuperación podría tener forma de “U”: una caída inicial más bien acelerada seguida por una recuperación muy lenta. Anticipan una caída del 3,8% para todo el año. «En un escenario positivo recién en el tercer trimestre del año entrante se superaría el nivel de actividad del tercer trimestre del 2023».
Desde LCG apuntan que «no se identifica un motor claro que pueda impulsar un marcado crecimiento en el corto plazo. La inversión difícilmente despegue fuerte, aún con la reciente aprobación de la Ley Bases, sobre todo porque entendemos que la incertidumbre respecto a la política cambiaria todavía Impulsará la decisión de «wait and see» de las empresas. Los indicadores de avance de mayo muestran que la recuperación todavía no es del todo clara y generalizada».