Carlos Cuburu: «Hoy podemos prever 8 o 10 minas más en producción dentro de 4 y 5 años en el país»
El subsecretario de Políticas Mineras de la Nación, Carlos Cuburu, fue uno de los expositores del Argentina Mining, que se desarrolló esta semana en Salta. Habló sobre el enfoque geopolítico de la minería del país, en un contexto de cambio de la matriz energética mundial y de los minerales, denominados críticos, que se necesitan. En diálogo con El Tribuno, también se refirió sobre la oportunidad que se abre para el sector con la puesta en marcha del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).
Hay muchas expectativas con el RIGI y lo demuestra el entusiasmo que se ve en el Argentina Mining…
Sí, claramente. Tuvimos, por suerte, a nivel nacional, la adhesión de la mayoría de las provincias. El Gobierno nacional ya lo reglamentó hace una semana y cuando vos haces letra (la reglamentación), lo que ahora esperás es cómo se entiende la letra, sabiendo que hay plazos de dos años para adherir a este régimen. Entonces, hablábamos con colegas, que la situación es ahora la respuesta que da el empresariado a los efectos de poner en valor los proyectos. Fundamentalmente, que lo blanquee, para que uno lo pueda medir y cuantificar. Y eso creo que es lo que se viene ahora. Pero las expectativas son enormes, muy grandes.
En eventos como este, la gran mayoría de los expositores son proveedores nacionales y, justamente, había cuestionamientos hacia el RIGI desde este sector por la posibilidad que abre a la competencia con empresas extranjeras. ¿Cuál es la posición de la Secretaría de Minería al respecto?
Ahí hay que hacer una importante aclaración. Cuando vos presentás un proyecto que adhiera al RIGI, en tu presentación del proyecto está contemplado el plan de proveedores y la incorporación porcentual de proveedoras argentinas. El plan de capacitación de proveedores es clave. Cuando vos recibís a una empresa grande que va a desarrollar algo equivalente a lo que fue minera Bajo de la Lumbrera (la mina de cobre de Catamarca), lo primero que te dice ¿hay proveedores? Sí, hay proveedores.
Hay que empezar ya un plan de capacitación. Eso significa inclusión capacitados con nuevos estándares. Eso es el gran desafío, que los proveedores logren estándares lo más cercano a lo internacional. Y seguramente va a haber muchísimo derrame.
En Salta, por ejemplo, existe una ley de promoción minera que obliga a las mineras a contratar un porcentaje de al menos entre un 40 y 70 por ciento de mano de obra local y servicios. Pero el RIGI apunta a un 20% ¿Cómo se va a compatibilizar esto?
Cuando vos pones un 70% de algo, es una medida protectiva. Es como que estás protegiendo el compre local, el proveedor local. Eso es cuando vos no tenés derrame de oportunidades. Cuando el RIGI y un proyecto como Taca Taca se ponga en marcha, vos te vas a dar cuenta que las capacidades de recurso humano en Salta van a estar colapsadas. Entonces abrís la frontera, te amparaste en un momento, pero después la demanda va a ser tan grande que vas a tener que mirar a Jujuy, vas a tener que mirar para las provincias vecinas, sin lugar a dudas. Son medidas protectivas atendiendo una minería de 22 o 23 minas en todo el país. Y hoy podemos prever 8 o 10 minas más en 4 o 5 años. Entonces eso es un significado muy potente. Para tener una idea, hoy Argentina entre empleo directo e indirecto tiene algo así como 60.000 personas. Chile tiene la minería muy desarrollada. Las comparaciones son ociosas, pero ¿sabés cuánto es el impacto en Chile con 10 minas más, 15 minas más que Argentina? 980.000 personas.
Se suele comparar las normativas vigentes para la minería de Argentina con las de Chile y Perú, donde mayores inversiones se volcaron en la actividad. ¿Con el RIGI, nos acercamos esos dos país en cuanto a la atracción de capitales?
Tengo una gran esperanza. Esos son países mineros, capaz que hay 3 generaciones de mineros que se va transmitiendo. Entonces, son mineros desde la cuna. Argentina no lo tiene. Pero ¿sabés qué tiene Argentina? Una mayor velocidad de aprendizaje. Lo que creo es que los proveedores van a adecuar normas muy rápidamente. O sea que se van a poner a la altura de cualquier empresa chilena que aporta servicios. O de cualquier empresa peruana. Argentina tiene que generar un mecanismo de asociativismo más claro, más transparente y menos egoísta. De manera tal de, cuando se venga la gran escala de la demanda, poder asociarte con quien hace lo mismo que vos buscando estándares de calidad elevados. A veces solo te vas a quedar un poco asustado por la gran demanda que va a venir. Entonces hay que impulsar la capacitación y el asociativismo.