Así cambian tu vida las tres oleadas tecnológicas
La tecnología digital, a lo largo de los años, ha ido avanzando y ganando terreno casi sin que nos diéramos cuenta. De no tener tele a color hemos pasado a tener smartphones que se han convertido casi en herramientas de “supervivencia”.
Para mí resulta súper interesante identificar los tres estadios por los que pasa cualquier innovación tecnológica porque entender cada una de las diferentes olas te permite mapear cómo puedes competir desde tu empresa. saber dónde estás siempre ayuda a saber dónde quieres llegar. Inspirándonos en el símil del genial Antonio González Barros, exploraremos las 3 oleadas que esconden cualquier tecnología. Lo explicaré huyendo del tan manido mundo digital. Usaré la industria del ferrocarril.
Primera ola: innovación fundacional
La primera ola de innovación se caracteriza por la creación y desarrollo inicial de una tecnología disruptiva. Pongamos el contexto del tren: en sus inicios, unos pocos visionarios lograron transformar una idea revolucionaria en realidad. Fue la época de los pioneros, aquellos que tomaron los primeros riesgos, construyeron las vías férreas y diseñaron las locomotoras y vagones primitivos. Esta fase no sólo implicó un avance técnico, sino también la superación de innumerables obstáculos logísticos, financieros y políticos pero, pero, pero sobre todo mentales. Había que romper con una forma de ver la vida. La importancia de esta ola radica en su capacidad para sentar las bases sobre las cuales se desarrollarán las futuras mejoras y adaptaciones.
Segunda ola: optimización y mejora del sistema
La segunda ola se centra en la mejora y optimización de la tecnología existente. Aquí entran en juego aquellos innovadores que, en lugar de crear algo completamente nuevo, buscan perfeccionar lo que ya existe. En el caso del tren, esta etapa vio el surgimiento de vagones más cómodos y eficientes, locomotoras más potentes y la creación de un mundo de servicios complementarios. Por ejemplo, aquí las estaciones de tren comenzaron a ofrecer cafeterías además de tiendas y para las compañías ferroviarias comenzaron a surgir servicios de formación para empleados ferroviarios para atender mejor a los clientes.
Tercera ola: transformación sistémica
La tercera ola es donde la verdadera magia ocurre. Aquí, la tecnología deja de ser una herramienta aislada y comienza a transformar profundamente la sociedad y la economía. El tren no solo cambió cómo nos movemos, sino que rediseñó ciudades, alteró patrones de trabajo y residencia, y creó nuevas oportunidades económicas. Los pueblos y ciudades crecieron a lo largo de las vías férreas, facilitando el comercio y la comunicación a una escala sin precedentes.
Hoy en día estamos viendo el inicio de nuevas olas de innovación con tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, la robótica y el blockchain. Actualmente, estamos en las primeras dos olas, donde la tecnología está siendo desarrollada y optimizada. Sin embargo, el verdadero potencial residirá en la tercera ola, donde estas tecnologías empezarán a transformar nuestras vidas de maneras que aún no podemos prever completamente.
Las empresas que desean estar a la vanguardia deben mirar más allá de las mejoras incrementales y enfocarse en las posibilidades transformadoras. No se trata solo de hacer mejores productos, sino de anticipar cómo estas innovaciones cambiarán las dinámicas sociales y económicas. Para los líderes empresariales, esto implica una visión estratégica que contemple no solo la tecnología en sí, sino sus amplias repercusiones.
La verdadera estrategia de éxito radica en comprender y adaptarse a los cambios profundos y duraderos que cada nueva ola de innovación trae consigo.