21 de septiembre de 2024

Torta de 600 kilos en el 165 aniversario

Con un acto que se desarrolló en la mañana de ayer en el complejo, debido al frío y la lluvia, los metanenses celebraron con alegría y una torta gigante, el Día de San José de Metán.

Las actividades fueron encabezadas por el intendente José María Issa. Participaron funcionarios de su gabinete, concejales, gauchos y representantes de instituciones, quienes concurrieron junto a familias de distintos barrios al complejo deportivo municipal, a pesar del intenso frío y la lluvia.

Para festejar el 165 aniversario de la denominada «ciudad de la miel», se preparó una torta de alrededor de 600 kilos que pudieron degustar los vecinos.

Luisa Villagrán , Silvia Guerrero , Silvia Mercado, Fabiola Britos, Andrea Güemes, Emilia Fernández, Walter Guerrero y Cristina Muñoz, quien está a cargo del equipo de la Unidad de Turismo, fueron los encargados de la elaboración y el montaje de la torta que tuvo como decoración la bandera de San José de Metán.

«Agradecemos a la Cárcel por hacer la mitad de los bizcochuelos y a todos los que ayudaron», dijo Muñoz.

«Hoy celebramos el aniversario número 165 de San José de Metán. Fue en 1859 cuando la Iglesia aceptó la donación de tierras de Guillermo Sierra para la construcción de una iglesia, plazuela, casa parroquial, enterratorio, cárcel y sala municipal. Eso permitió el surgimiento de la ciudad. En este día es grato reconocer el trabajo que realiza cada uno desde su lugar para que la ciudad siga creciendo», dijo Emanuel Sierra, tataranieto de don Guillermo Sierra.

«Quiero agradecer al intendente José Maria Issa y a los que trabajaron en la elaboración de esta torta gigante para seguir generando ese sentido de pertenencia, de amor a San José de Metán. Guillermo Sierra era uno de los concejales del antiguo Consejo Municipal de Rosario de la Frontera. La donación permitió nuestra autonomía y la creación de las instituciones básicas para los metanenses. Guillermo Sierra luego fue designado jefe político y según documentos y relatos familiares tenía tan solo 28 años de edad siendo así un gran visionario», destacó.

Los alumnos de 1º grado A y B de la Escuela Nº4439 Guillermo Sierra presentaron una poesía y acróstico. Mientras que los estudiantes de 6º y 7º grado de la misma escuela deleitaron al público con un baile especial, y el Ballet Municipal Raíces Salteñas hizo revivir tradiciones y cultura.

Uno de los momentos más emotivos fue cuando se cantó el feliz cumpleaños a la «ciudad de la miel» con los acordes de la Banda de Música Municipal.

«El pasado se recrea»

«El pasado se recrea cada vez que recordamos y recordar es una forma de representarnos algo que sabemos, algo que permanece en la memoria. Hoy nuestra ciudad, sus instituciones y su gente están transitando un proceso de recuperación de memoria y por ende de identidad. Algunas representaciones de lo acontecido en el transcurso de estos 165 años, comienzan a ser develadas a partir del recuerdo de los propios metanenses, con el fin de reconstruir nuestro pasado ,de situarnos en nuestra propia historia como comunidad, recuperando una memoria que no se inventa ni se impone sino que ha sido construida desde 1859, paso a paso por cada uno de los vecinos de San José de Metán», dijo la profesora e historiadora, Norma Aguilar, quien está a cargo del Archivo Histórico de Metán.

«Este espacio que hoy ocupa la Villa San José fue un sector de la estancia de Metán donado por Don Guillermo Sierra, un día como hoy, pero de 1859. Gracias a ese gesto se organizó la población existente en este territorio, alrededor del sector donado. Esto que sucedió en Metán, a los que algunos temen identificar con fundación pues lo asocian a procesos coloniales, debiéramos llamarlo en los tiempos de República creación; creación de una Villa o pueblo que respondió a una política urbanística, la del gobernador Manuel Solá, buscando organizar la población dispersa en la campaña con el carácter de agricultores y arrenderos, ya no de milicianos como en el tiempo del Gral. Güemes», destacó.

«Lo que sucede en este espacio es semejante a lo que se registra en el Tala, la Candelaria, Rosario de la Frontera, Cafayate: donaciones de estancieros que son aceptadas por el gobierno provincial para urbanizar el espacio rural y a partir de allí la parcelación de los terrenos y la compra por quienes estaban interesados en instalarse. Así irá tomando forma la Villa San José, luego constituida en ciudad», destacó Aguilar, quien es ciudadana ilustre de Metán.

«Decidí hoy, para referirme a este hecho, hablar de una mujer; doña Petrona Eguía una metanense que llega a vivir casi 120 años, naciendo tres años antes que el surgimiento de la Villa. En una entrevista que le realizan en 1971 por su

cumpleaños 115, contaba que Metán era un rancherío disperso, que vivió la epidemia de cólera, que apreció la llegada del ferrocarril, que sufrió el terremoto del 48 y las inundaciones del 49, que comenzó a ver el progreso paulatino. Petrona fue madre de 14 hijos a los que mantuvo trabajando como lavandera; sus hijos y los hijos de sus hijos ayudaron con su trabajo a engrandecer nuestra tierra. Petrona es el ejemplo de los miles de metanenses que, trabajando, aún desde el espacio más humilde, contribuyeron a que nuestra ciudad crezca. Su historia que no es otra que la historia de Metán, idéntica a las de otros muchos metanenses, estuvo atesorada por su familia; su nieto Manuel y su bisnieta Liliana decidieron compartirla con nosotros», detalló la historiadora.

«Aunque por momentos pretendieron fragmentar nuestra identidad muchos hechos nos demuestran hoy, que la memoria está intacta. Aunque por ordenanza se nos prohibió festejar el nacimiento de la ciudad hoy les digo con voz bien alta y con el orgullo inmenso de ser metanense ífeliz cumpleaños Metán!», concluyó Aguilar.

Eltribuno

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *