«La Ciudad no es de un gremio»: Jorge Macri apuntó contra las empresas por la basura en las calles y anunció más sanciones
Hace diez días, las calles de la Ciudad amanecieron con basura por un apriete del gremio de Camioneros, que apuntaba a la licitación de las grúas de acarreo. Este miércoles, el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, anunció más controles y sanciones a las empresas de recolección, barrido y limpieza. «La Ciudad no es un gremio», dijo.
«No vamos a permitir que la limpieza esté en juego por actitudes que no corresponden», desafió el alcalde porteño en una conferencia de prensa, donde anunció medidas vinculadas al plan integral de limpieza e higiene para toda la Ciudad y más controles a la tarea de las empresas.
Desde el centro de reciclaje de Villa Soldati, el jefe de Gobierno recordó lo ocurrido días atrás, cuando la Ciudad amaneció con contenedores de basura desbordados y bolsas en veredas y calles de varios barrios por una protesta de los recolectores, encuadrados gremialmente en el sindicato de Camioneros, que conducen Hugo y Pablo Moyano.
La medida de trabajo a reglamento apuntó a las demoras en la definición de la licitación del sistema de grúas de acarreo, en la que dos de las tres empresas que habían logrado la preadjudicación estaban vinculadas con la recolección de basura.
«Si una empresa demoró el servicio y no se atendió la demanda, el compromiso va a ser estar del lado de los vecinos. Porque esta ciudad es de los vecinos, no de un gremio o de una empresa«, señaló Macri en clara alusión a la actitud del sindicato que conducen Hugo y Pablo Moyano.
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El Jefe de Gobierno porteño anunció la ampliación de una planta de reciclaje.
El lunes, cuando la Ciudad amaneció llena de basura, se habló de un «apriete» de Camioneros y se especuló con la vinculación del gremio de los Moyano con dos de las tres empresas elegidas para hacerse cargo de las grúas. Una de ellas, Aschira, opera en la recolección de basura en barrios como Caballito, Parque Chacabuco y Boedo.
Desde Camioneros dijeron que la medida de trabajo a reglamento tenía que ver con «defender las fuentes de trabajo de los 350 empleados de las grúas, que en 2022 pasaron a ser operadas por el Gobierno de la Ciudad, tras más de 30 años bajo la órbita de dos empresas que operaban con contratos vencidos y prórrogas, y que pagaban un canon de apenas $ 55.000.
Cuando la gestión de Horacio Rodríguez Larreta interrumpió ese vínculo, cuestionado porque las grúas iban a toda velocidad y acarreaban autos bien estacionados, entre otras irregularidades, la operación pasó a manos de AUSA, la empresa estatal porteña que gestiona las autopistas. Y tras un protesta de Camioneros se acordó que a los empleados los tomara SBASE, que se ocupa de los subtes, para que no perdieran el convenio con el gremio de los Moyano.
La semana pasada, cuando era un hecho que Macri iba a dar de baja la preadjudicación firmada en los últimos días de la gestión de Larreta, Camioneros ejerció presión con la basura y desde el Gobierno de la Ciudad manifestaron que no era por los 350 trabajadores, a quienes les garantizaron los puestos de trabajo; sino por el vínculo con las dos empresas que se quedaban sin operar el servicio.
El contrato que suspendió Jorge Macri representaba un acuerdo por 10 años y $ 57.000 millones. El Ejecutivo había comenzado a negociar con las tres compañías que iban a dividirse la operación en toda la Ciudad para que bajaran el canon. E incluso había planteado que no iba a hacerse cargo de la inversión incicial, para la compra de grúas y la construcción de tres playas de acarreo nuevas, que era de unos us$ 8 millones.
Luego se supo que las negociaciones se trabaron y, en un conexto de crisis, con baja en la recaudación porteña, se decidió no avanzar con el pre acuerdo. Este miércoles, Jorge Macri dijo también que la auditoría interna determinó que no hubo irregularidades en la firma de la preadjudicación. Ël mismo no había descartado esa posiblidad en declaraciones periodísticas, en las que también anunció que se haría una investigación.
Con más controles y sanciones, tambén se advierte al gremio de Camioneros sobre posibles medidas de fuerza en los próximos meses. Pablo Moyano viene advirtiendo que los contratos con las empresas de recolección se vencen y cumplen diez años en octubre, y que por eso reclamará una indemnización para cerca de 10.000 trabajadores.
Pero la Ciudad no está dispuesta a pagarla, ya que la prórroga ya está firmada y extiende los vínculos hasta 2028, con lo cual no cambian las condiciones para los trabajadores. El antecedente más reciente ocurrió con los empleados del servcios de grúas, que si fueron indemnizados cuando se dieron de baja los contratos con Dakota y BRD y pasaron a la órbita estatal. Se pagaron sumas de hasta $ 4 millones pese a que se mantuvieron todas las fuentes de trabajo.