La nutrición y nuevamente el uso del barbijo ayudan a evitar la proliferación de los casos de gripe
Santino tiene 8 y esta semana, la gripe A lo dejé en cama. «La fiebre no quería bajar, y el dolor de cuerpo no lo dejaban ni caminar», contó su mamá.
A la vista estaban todavía los rastros de lo que dejó la fiebre. Los labios partidos y el cuerpo de jugador de fútbol, todo dolorido. «Me duelen las rodillas y las piernas. Todavía no puedo ir a los entrenamientos», agregó el pequeños que lleva una semana en cama. Antes que él, fue su hermana la que estuvo igual de enferma. Amos fueron a la escuela solo los días que tenían pruebas y volvían a la cama.
Si bien, hasta esta altura del año, los casos de gripe fueron menos de que los de 2023, los síntomas se volvieron fuertes y la enfermedad afectó más a los niños entre 5 y 9 años.
En diálogo con El Tribuno, el doctor Bernardo Biella, explicó que en octubre de 2023, desde la Organización Mundial de la Salud, a través de la Asociación Panamericana de la Salud, se informó al Ministerio de Salud Pública de la Nación, que los virus de gripe que iban a circular por el cono sur de América iban a ser: H1N1, H3N2, cepa Yamagata y cepa Victoria y la influenza B, de las cuatro variedades de gripe que hay.
«Esta información se brindó con tiempo para comprar las vacunas, y evitar la proliferación de casos. Hoy la provincia casi termina de cumplir con el objetivo de la vacunación. Ahora bien lo que pasó, en algunas familias, es que mandaron a sus hijos a la escuela cuando ya estaban enfermos. Esto generó brotes gripales como en el departamento Rivadavia», agregó Biella.
Cómo cuidarse
«Hay que recordarles a los padres o abuelos que si tenemos un niño con fiebre, dolor de cuerpo, catarro, mal estar general y secreciones como rinitis con moco, toz y conjuntivitis no hay que enviarlo a la escuela. Por el contrario, hay que aislarlo, darle bastante líquido, darle paracetamol por el tema de la fiebre y además, si estos niños llegan a salir de casa, por alguna cuestión tienen que usar barbijo», detalló Biella.
En los casos que se presenta fiebre la hidratación es vital y además, para evitar o al menos soportar mejor la enfermedad, la alimentación es otra de las claves.
«Hay que comer futas y verduras de todos los colores, que ayudan a evitar la resfrío. La vitamina C es muy útil. Es muy recomendado comer jugos de naranja y darles a los chicos las frutas procesadas, así las comen más fácil», recomendó el médico.
Romina Sosa, licenciada en Nutrición, explica que para mejorar el sistema inmunológico, los niños tienen que consumir vitamina C que esta en los cítricos, en el tomate, kiwi y después «tenemos otros minerales como el zinc que favorecen el sistema inmune, y está en la carne roja, el huevo y germen de trigo».
La nutricionista destacó que mantener altas las defensas es fundamental, y por lo tanto, la combinación de vitaminas y minerales es fundamental. «La vitamina A, que está en los lácteos, es otro aporte importante», agregó Sosa.
A las vitaminas hay que sumarle la actividad física. «Es necesario realizar una actividad física que los ayuda a resistir y eliminar estas enfermedades», concluyó la nutricionista.