Las importaciones se derrumbaron en mayo y el superávit marcó un récord de US$ 2.656 millones
En mayo de 2024, las exportaciones totalizaron US$ 7.622 millones y las importaciones US$ 4.966 millones, lo que permitió que la balanza comercial mostrara un récord histórico con un superávit de US$ 2.656 millones.
A la vez esto le permite al Gobierno mostrar cinco meses seguidos de superávits gemelos, tras el resultado que se conoció el martes de las cuentas públicas.
Según informó el INDEC, las exportaciones aumentaron 21,7% respecto a mayo de 2023 debido principalmente a un incremento de 30,6% en las cantidades, ya que los precios disminuyeron 6,8%. La venta de la cosecha de soja incidió en este resultado.
«Mayo registró la mayor suba de las exportaciones del año, gracias a una fuerte suba en las cantidades exportadas de Productos Primarios y a un fuerte incremento en las exportaciones de Combustibles y Energía, cifras de fuerza potenciadas por subas de menor calibre en sectores tales como químicos, plásticos, y minería», apuntaron desde la consultora Abeceb.
Al mismo tiempo, las importaciones descendieron 32,8%, debido a caídas tanto en las cantidades como en los precios, que fueron de 29,6% y 4,5%, respectivamente.
La retracción en la actividad económica fue decisiva para la caída marcada de las importaciones, que en lo que va del año retrocedieron 26%, mientras las exportaciones crecieron 12,5% en el mismo período. Esto permitió que el superávit acumulado en los cinco meses transcurridos del 2024 sea de US$ 8.812 millones.
«Si en mayo los precios hubieran sido los mismos de 2023, el saldo comercial hubiese sido de US$ 2.980 millones. Es decir, que los cambios en los precios tuvieron un efecto negativo de US$ 324 millones», indicó Nadin Argañaraz, director del IARAF.
Además de la cosecha, otro factor que ayuda a explicar el resultado positivo del mes es lo que ocurrió con el rubro combustibles, que pasó a ser superavitario de un año a otro.
Las exportaciones de productos primarios (PP) alcanzaron los US$ 2.029 millones, valor 52,8% superior al del mismo período del año anterior. En este rubro, las cantidades subieron 74,1% y los precios cayeron 12,1%. Este repunte se debió principalmente a mayores ventas de semillas y frutos oleaginosos.
El valor de las exportaciones de combustibles y energía, que llegó a US$ 892 millones, se elevó 51,1% por una suba de 0,2% en los precios y de 50,5% en las cantidades, esencialmente debido a un incremento del volumen exportado de carburantes (59,6%) y de petróleo crudo (45,1%). El rubro que más aumentó fue petróleo crudo en US$ 208 millones.
Las manufacturas agropecuarias alcanzaron US$ 2.788 millones y crecieron 7,4% y las industriales sumaron US$ 1.914 millones.
Entre las importaciones, la mayor caída correspondió a combustibles y lubricantes, con una disminución de 61,5% (-US$ 626 millones).
Los bienes de capital decrecieron 33,2% (-US$ 368 millones) y piezas y autopartes registraron una reducción de 28,1% (-US$ 414 millones). Los bienes de consumo disminuyeron 27,5% (-US$ 195 millones). A su vez, los bienes intermedios cayeron 26,4% (-US$ 736 millones).
«Con los primeros cinco meses con un superávit comercial orillando los US$ 9.000 millones se espera que la tendencia creciente de las exportaciones en cantidades se mantenga principalmente impulsadas por los sectores primario y energéticos, en tanto que las importaciones seguirán en niveles bajos, aunque recuperándose en el margen al compás de la tibia mejora esperada en el nivel de actividad y de un peso que también seguirá apreciándose en el margen», señaló Abeceb.
La consultora de Dante Sica proyecta a un superávit comercial en torno a los US$ 16.000 millones para este 2024 versus un déficit de US$ 6.926 millones en 2023.