Las panaderías salteñas en crisis: cierran con pérdidas en el primer semestre
Hay diversos factores que anticipan una crisis total en el sector de las panaderías en Salta. Las subas en los precios de las materias primas, los aumentos en los impuestos y servicios públicos, las negociaciones paritarias, la liberación en los alquileres y las bajas en las ventas.
En este informe tomamos como referencia los precios de los últimos 6 meses y cómo evolucionaron hasta hoy.
Según las opiniones de varios propietarios de comercios panaderos, las ventas bajaron un 40 por ciento desde que comenzó el año. En realidad ya vienen bajando desde octubre y noviembre de 2023 cuando los resultados electorales comenzaron a desatar una inflación descontrolada.
Desde finales de diciembre de 2023 hasta la fecha los precios se liberaron se transformó todo en un terreno inestable e impredecible.
«Con la inflación que tuvieron todos los insumos, hoy el precio del kilo de pan debería estar a unos 4.500 pesos. Pero con la baja en las ventas que ya tenemos, si ponemos el pan a lo que debería costar, tendríamos que cerrar todas las panaderías porque nadie nos vendría a comprar», dijo el presidente de la Cámara de Panaderos de Salta, Daniel Romano.
En las calles de Salta el precio promedio del kilo de pan está a 2.400 pesos; la mitad. Por supuesto que esa baja en las ganancias la absorben los comercios.
La disparidad en las subas de los insumos es casi imposible de explicar. Hay productos que subieron un 100 por ciento en medio año como la caja de lavadura que valía 20 mil pesos en la última semana de diciembre 2023 y se fue a 41 mil pesos en la última semana de junio de 2024.
La grasa aumentó casi un 150 por ciento. Por lo que el tacho de 15 kilos pasó de 11 mil pesos a los 25 mil pesos en el mismo período. Algo parecido con la caja de huevos que se fue de los 11 mil a los 23 mil pesos.
Pero lo peor es con la harina. Para los grandes comercios, con harina subsidiada, pasó de los 4 mil a los 13 mil pesos. Los chicos que no tenía el subsidio pasó de los 7.300 pesos a los casi 13 mil pesos la harina «Pueblo». Hablamos de un 300 por ciento de suba en la harina que quedó sin subsidio.
«Yo en enero compraba mil pesos de pan para toda mi familia (habla de 5 personas) y ahora pago 4 mil por la misma compra», dijo el domingo un padre que salió a hacer las compras en su día.
«Es verdad que muchas personas comenzaron a bajar en la cantidad de pan que compran. Antes venía y compraban sin preguntar el precio. Pero en estas semanas tuvimos que subir los precios porque las materias primas venían subiendo un poquito todas las semanas. Nos duele tener que subir los precios, pero no tenemos otra opción», dijo Raquel, propietaria de una panadería de zona sur.
Imparable
Por más que el Gobierno nacional se empeñe en comunicar que la inflación comienza a desacelerarse, los propietarios ya saben que se vienen los nuevos aumentos en tarifas de servicios públicos. El gas completará en este mes una suba de 500 por ciento y la luz un 300 por ciento en el primer semestre de este año.
«También entran a jugar las negociaciones salariales en las paritarias. Además, siguen subiendo los impuestos municipales, provinciales y nacionales. No sé cómo quieren que baje la inflación», dijo Romano.
Lo último que afectará indefectiblemente el precio del pan estará dado en la nueva renovación de contratos de alquileres que se viene en esta mitad de año y que, con la liberación del mercado, nadie sabe cómo afectará a las panadería que son todas pymes.
Aumenta la venta callejera
Daniel Romano señaló algo inquietante. El dirigente dijo que en la calle se puede ver a una gran cantidad de nuevos vendedores ambulantes vendiendo pan. Dijo que es «un síntoma de crisis».
«En las calles, avenidas y rutas de nuestra ciudad se ven a bolleros, tortilleros. Se vende facturas y hasta pizzas. Eso pasa cuando no hay plata ni trabajo y entonces la gente sale a vender lo que sea», dijo el panadero. Por supuesto que eso también afecta a las panaderías que cumplen con todos los requisitos.