Buscan acortar la duración de los juicios laborales
Los juicios laborales son mecanismos para resolver conflictos entre trabajadores y empleadores. En el fuero laboral del Distrito Judicial del Centro se registraron 1,327 juicios nuevos desde el 1 de febrero hasta el 30 de septiembre de 2024. En el mismo período de 2023, se contabilizaron 1,203, lo que representa un leve incremento de 124 casos. Estos datos fueron proporcionados por la Sindicatura del Poder Judicial de Salta.
«En esos 124 juicios adicionales entre 2023 y 2024, hay una gran incidencia de ejecuciones de sentencia y de honorarios. Esto responde a las consecuencias de un juicio ordinario, que incluyen el impago, en tiempo y forma, de lo que ordena la sentencia», explicó la jueza de Primera Instancia del Trabajo N° 3 del Distrito Judicial del Centro, María Luján Pérez del Cerro.
La jueza añadió que, desde la Justicia Provincial y, en especial, desde la Justicia del Trabajo, están trabajando intensamente y aplicando todas las herramientas que permite el Código de Procedimientos para reducir los tiempos de los procesos laborales.
Señaló que, en promedio, la duración de un juicio laboral en el juzgado a su cargo puede ser de hasta dos años.
Además, indicó que «estamos utilizando mucho la herramienta de la conciliación judicial para tratar de que las partes lleguen a un acuerdo que ponga fin al litigio, sin necesidad de recorrer todo el proceso hasta una sentencia, con su posible instancia apelatoria».
Tras la pandemia
Recordó que los juicios ordinarios, que generalmente inicia el trabajador en contra del exempleador, se habían incrementado considerablemente como consecuencia de la pandemia de COVID-19.
«Hubo muchos juicios por eventos ocurridos desde marzo de 2020, cuando se decretó el ASPO y luego el DISPO. Hubo muchas malas comunicaciones entre empleadores y empleados, lo que aumentó las dificultades habituales de la relación laboral», explicó la magistrada.
Mencionó que en una relación laboral pueden surgir conflictos por el pago de salarios por debajo de lo establecido, por cambios en el horario o lugar de trabajo, o por cuestiones de categorización dentro de un convenio colectivo.
«Son todos temas que pueden generar conflictos y están vinculados al contrato de trabajo en sí», afirmó.
Desde la pandemia
Precisó que, a los conflictos que surgen naturalmente de la relación laboral o del contrato de trabajo, se añadieron otros derivados de las restricciones del ASPO y DISPO, como los siguientes interrogantes: «¿Soy de riesgo o no? ¿Estoy obligado a asistir? ¿Puedo trabajar desde mi domicilio? ¿Me puedo llevar la computadora del trabajo? ¿Debe el empleador cubrir el costo de la conectividad desde mi casa?»
«Este tipo de conflictos son los que estamos resolviendo ahora, en 2024. Son disputas que surgieron entre 2021 y 2022, cuando se levantaron las restricciones», precisó.
El tiempo
Y destacó: «En el Juzgado Laboral N° 3 que está a mi cargo, un proceso dura un máximo de dos años».
También informó que han aumentado exponencialmente los juicios de ejecución, tanto de sentencia como de honorarios. «Esto significa que, una vez terminado el juicio ordinario donde se resuelve el conflicto entre el trabajador y el empleador, y el juez ordena, por ejemplo, que la empresa pague una determinada suma, si la empresa no abona el monto en un plazo de seis días, o viceversa, si el empleado debe pagar los honorarios del abogado de la empresa y no lo hace dentro del plazo, se inicia un juicio de ejecución para cobrar el monto de la sentencia o los honorarios. Así, de un expediente ordinario nacen dos expedientes adicionales: uno de ejecución de sentencia y otro de ejecución de honorarios», detalló.
Solución
Finalmente, recalcó: «Desde el Poder Judicial tenemos muy claro que brindamos un servicio a la sociedad, y nuestro objetivo es resolver los conflictos entre las partes. Para solucionar estos conflictos, utilizamos todas las herramientas posibles, no solo la sentencia, sino también la mediación y la conciliación judicial. Esto se debe a que tanto los abogados de las partes, como el juez y todos sus auxiliares son efectores de la Justicia, y todos debemos trabajar de manera proactiva para encontrar una solución al conflicto», concluyó.
Los pasos de una contienda
En primera instancia, cuando se suscita un conflicto entre un empleador y un trabajador, generalmente, hay una sucesión de cartas documento que se van cursando entre las partes, lo cual lleva un tiempo. Puede haber una instancia de conciliación ante la Secretaría del Trabajo y recién cuando el conflicto no puede ser dirimido ni por las partes, ni por el organismo mencionado, ya que no hay acuerdo, es cuando llega a los Tribunales.
Al ser consultada sobre si por el contexto económico se elevaron la cantidad de juicio laborales, la jueza María Luján Pérez del Cerro explicó que en los casos que llegan a Tribunales no se detecta algún tipo de circunstancia particular que haga elevar o bajar la cantidad de contiendas laborales, ni tampoco una causa predominante.