Blanqueo: EE.UU envió datos masivos de cuentas de argentinos a la AFIP para cazar evasores
29 de septiembre de 2024Dos meses y medio después del inicio del blanqueo de capitales, el Gobierno ya recibió buena parte de los datos de cuentas bancarias de argentinos en Estados Unidos. Se trata del primer envío masivo de información de ese país gracias a un acuerdo que empezó a negociar Mauricio Macri, se cerró bajo la gestión de Alberto Fernández y ahora se concretó con Javier Milei. Es clave para cazar evasores.
La AFIP, encabezada por Florencia Misrahi, ya tiene en sus manos la identificación de titulares de cuentas (una persona física), las instituciones financieras (que están obligadas a reportar) montos brutos de intereses, dividendos y otros ingresos de fuente estadounidense percibidos por residentes argentinos y depositados en cuentas en ese país hasta el 31 de diciembre pasado. Mañana es el último día para recibir datos.
Los mismos comenzaron a llegar después de la reunión que mantuvo la titular del organismo con su par del Internal Revenue Service (IRS), Daniel Werfel, en Washington.»Los datos ya llegaron. Ahora se incorporan a las matrices de fiscalización. Sé aceleró la llegada gracias al viaje al IRS de Misrahi en agosto. En mayo, el IRS confirmó que Argentina cuenta con las medidas de seguridad de datos y la infraestructura adecuada», confirmaron desde AFIP.
La Ley de Cumplimiento Tributario de Cuentas Extranjeras (FATCA, por sus siglas en inglés) fue acordada por Sergio Massa en 2022, pero su proyecto de blanqueo nunca prosperó. Ahora, le permitirá al gobierno contar con una herramienta para sumar contribuyentes al régimen de regularización abierto en julio pasado, ante la posibilidad de que los bienes en las sombras sean detectados en Estados Unidos y en el futuro, en otras jurisdicciones.
Misrahi insistió hace dos semanas que el actual blanqueo -el sexto desde la década de los 80- es «la última oportunidad hasta el 2038» para el que exterioriza bienes, y apuntó a los controles que prepara para el «día después». «La recomendación es que quienes ingresen puedan hacerlo y lo hagan por todos los bienes ocultos», dijo la titular del organismo en una charla ante el Consejo de Profesionales de Ciencias Económicas.
En ese marco, sostuvo que «el FATCA permitirá traer información de cuentas de argentinos en Estados Unidos y también y sobre todo abre puertas para dar con datos de beneficiarios finales en jurisdicciones que son principales destinos de estructuras societarias creadas para opacar y ocultar». Y la semana pasada se reunió con las autoridades fiscales de Reino Unido e Irlanda, dos de los países más avanzados en controles tributarios.
Argentina mantiene radares encendidos en varios lugares: hay acuerdos con 29 países, entre ellos Mónaco y Sudáfrica, que integran la «lista gris» de países bajo mayor vigilancia por parte del GAFI. Y existen convenios con la OCDE, que alcanzan a 146 jurisdicciones, incluyendo a Uruguay -adonde mudaron su residencia fiscal algunos varios empresarios argentinos-, Australia, Nueva Zelanda, Suiza y paraísos fiscales (Islas Caimanes, Vírgenes y Seycheles).
De la mano del FATCA, la apuesta es regularizar la mayor cantidad de activos y deudas. El último blanqueo fue el de Mauricio Macri en 2016, cuando se regularizaron US$ 116.000 millones e ingresaron depósitos por US$ 7.700 millones. Luis Caputo aspira a que se exterioricen hasta US$ 40.000 millones. Los bancos estiman que los depósitos en dólares se ubican entre los US$ 8.000 millones y US$ 12.000 millones, tal como informó Clarín.
La prueba de fuego será este martes: es que si bien el Gobierno anunció la prórroga del cierre de la primera etapa del blanqueo hasta el 31 de octubre, quienes ya blanquearon efectivo podrán retirar sus depósitos el 1 de octubre (y si lo hacen, no podrán volver a incorporar activos). Y quienes adhieran después de este lunes tendrán que esperar hasta fines de octubre para retirar depósitos. El decreto se publicará en las próximas horas.
«Seguramente, el FATCA pueda revelar datos importantes sobre activos a exteriorizar. La extensión le sirve al gobierno para tener tiempo de analizar esa información y notificar a contribuyentes que no tengan exteriorizados tales activos invitándolos a blanquear. Quienes fueran «descubiertos» a partir de esa información, no tendrían oportunidad de entrar al régimen«, explicó Gonzalo Brest, socio de Impuestos de KPMG Argentina.
A falta de financiamiento externo, el blanqueo se convirtió en uno de los principales motores del “veranito” cambiario-financiero en septiembre. Este mes, el riesgo país bajó 8%, la brecha cayó de 40% a 25%, las reservas brutas superaron los US$ 29.000 millones y el Merval en dólares creció 6%, según Invecq. Sin embargo, el Gobierno sigue teniendo problemas para aumentar las reservas netas, que son negativas en US$ 5.000 millones.